ColorChecker® Gray Balance

32,80 sin IVA

La carta ColorChecker Balance de Grises es una versión de bolsillo del parche de 18% gris usado en la ColorChecker Classic de 24 parches, y que está desarrollado para ofrecer una superficie uniforme y colorimétricamente ajustado para que sea espectralmente neutral (absorbe la misma cantidad de luz roja, azul y verde). Esta carta permite ajustar la colorimetría de la cámara para que se adecúe a las diferentes condiciones de iluminación. Siendo útil tanto en interior como en exterior para cámaras de fotografía, video o cine.

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    Descripción

    Carta gris 18%; qué, cómo y porqué.

    El uso de una carta de balance de grises permite crear una referencia externa con los valores de color reales reflejados por dicha carta y que ya tienen en cuenta la iluminación ambiente.

    Carta gris con objetivo

    De esta forma, la cámara puede reajustar el espacio de color utilizado según cada situación, sustituyendo provisionalmente en cada caso los valores originales almacenados en su memoria.

    El ojo humano es capaz de adaptarse “automáticamente” a cualquier tipo de iluminación y reinterpretar la percepción de la luz reflejada por los objetos como los colores de referencia memorizados por nuestro sistema perceptivo (y psicológico).

    De esta manera, el ojo humano “ve” como blanca la luz reflejada por un objeto que refleja toda la energía emitida por una fuente de iluminación, independientemente de si esta tiene una calidad u otra.

    Dicho de otra manera, el ojo humano ve igual de blanco un folio bajo una luz de incandescencia o un tubo fluorescente, o igual bajo la luz del atardecer como de un día nublado. De esta misma forma, todo el espectro visible (los colores) se percibe “igual” por el ojo humano independientemente de la temperatura de color del iluminante.

    Por tanto, concluimos que la adaptación cromática es una singularidad de nuestro sistema visual (perceptivo y psicológico), gracias a la cual nuestro cerebro es capaz de compensar las diferencias de color producidas por la fuente de luz al reflejar sobre los objetos.

    En general, las cámaras fotográficas, y también las de video, por defecto tienen en memoria unas coordenadas colorimétricas estándar para los valores de blanco y negro (también el gris neutro). Estos valores fijos son los que utiliza la cámara para generar el espacio de color según nuestros ajustes en cada caso concreto. Obviamente, estos valores por defecto solo responden a nuestros ajustes y no tienen en cuenta las condiciones de luz cambiantes para cada ocasión, por lo que es imprescindible reajustar en cada caso el resultado obtenido.

    El ajuste perfecto de la temperatura de color de una cámara a cualquier fuente de iluminación se consigue, en fotografía y cine, mediante una carta de referencia iluminada con la fuente de luz que se vaya a emplear, forzando de forma electrónica a la cámara a que modifique su referencia de valor (blanco, gris o negro) al valor obtenido por comparación con la muestra.

    Información adicional

    Peso227 g
    Dimensiones178 × 102 × 20 mm