4. Monitores

¿Cuál es el mejor monitor para fotografía?

Son muchas las variables a considerar para decidir cuál es el mejor monitor para la edición de fotos; en el procesado de la imagen, debemos ser muy exigentes con la precisión en la reproducción del color, y a la hora de elegir un monitor para trabajar con programas como Adobe Lightroom, Adobe Photoshop Elements o GIMP debemos ser más exigentes que con un monitor de sobremesa normal.

Al seleccionar un monitor, el fotógrafo debe responderse a preguntas acerca de cuál puede ser la resolución  adecuada ¿4K, QHD, Full HD?, o sobre el espacio de color ¿sRGB, Adobe RGB?, el tamaño de la pantalla ¿24 pulgadas o 27 pulgadas?, las posibilidades de calibración ¿por hardware o por software?, y muchas más. Y no siempre están claras las respuestas. Y hay opiniones para todos los gustos.

Por supuesto, porque el mejor monitor es también una cuestión de gustos. Hay para quienes la pantalla especular del iMac es la mejor opción, porque es la que ya tienen un su ordenador de trabajo, para otros las opciones que brinda NEC son razonables y ajustadas en precio, los exigentes no se apean de las gamas altas de Eizo y no entienden cómo se puede trabajar con otro monitor que no sea uno de esos modelos.

En nuestra opinión hay una serie de factores que son determinantes a la hora de trabajar con precisión el color en imágenes de calidad, y son factores muy sencillos que, independientemente de gustos, todo el mundo compartimos:

Trabajar en un amplio espacio de color. Evitar reflejos y luces externas que distorsionen la percepción visual del resultado en pantalla. Posibilidad de calibración. Comportamiento estable del panel. Eficiencia energética. Disponer de conexiones múltiples y estándar.

Y casi nunca nos preocupamos del número máximo de colores que pueden ser mostrados por un monitor en concreto, y el papel que juega en esto la tabla de consulta (LUT). Estos dos factores no suelen ser tomados en cuenta por la mayoría de fotógrafos en el momento de elegir un monitor, pero son críticos para la reproducción del color. Ambos factores se deben considerar siempre, sobre todo cuando la elección es un monitor LCD de color para aplicaciones críticas tales como la edición de fotos o el diseño gráfico.

Seguramente se os ocurren muchas más, pero en nuestra opinión, estas cuestiones son las más críticas, como veis no entramos en otros aspectos como el formato del panel o la resolución, que siendo muy importantes, quedan en segundo plano ante los primeramente expuestos.

Cuando dedicas mucho tiempo a trabajar delante de un monitor en la edición de imágenes, acabas comprendiendo la importancia de la ergonomía, y no solo en cuanto a la posición del cuerpo en la silla o de la mano respecto al ratón, tableta o trackpad, sobre todo la importancia de la ergonomía visual; el beneficio para la salud de nuestros ojos que supone contar con una pantalla con tratamiento anti-reflejos y una visera que aísle la luz ambiente.

Existen muchos blogs donde se analizan monitores (mucho cuidado con los que tienen claros intereses comerciales) y donde podemos encontrar comparativos de diferentes modelos, estos sitios en la web pueden ser interesantes para tener una recopilación de características y ahorrarnos el trabajo de búsqueda, pero la última palabra la tienes tú.